
¿PUBLICIDAD EN PAPEL? SÍ.
En el post de hoy me gustaría daros algunas pincelas sobre los motivos por los que mi respuesta a la pregunta: “Publicidad en papel?”, es “SÍ”. Y es que el poder del papel es infinito.En muchas ocasiones diseñamos o plasmamos las ideas de nuestros usuarios en el momento de iniciar su actividad como empresa, autónomo o en nuevos proyectos.
Cuando el cliente entra por la puerta repleto de ideas e ilusión, es el momento de crear el logo y, a partir de ahí, toda la papelería corporativa (cartas, sobres, tarjetas, carpetas…) es decir: la imagen.
Nos sentamos juntos y seguidamente le formulo la pregunta:
“¿te gustaría disponer de trípticos, dípticos, folletos o algún catálogo?” y espero la respuesta, que en la mayoría de casos es la siguiente:
“No, no, esto ya me lo está haciendo el de la web, lo voy a tener allí, de hecho ya está en internet”. Cuando escucho esta respuesta, me digo para mis adentros: “Otro”, y es ahí donde comienzo mi discurso (que en estos casos lo sé de memoria).
Primero le digo: “No tenemos el logo ni la imagen, y ya tienes página web? ¿no debería la página web tener la imagen similar al diseño corporativo?
Segundo comentario: ¿estás seguro que no quieres un resumen de tus productos o servicios impresos (folletos, dípticos..) aunque sea algo muy sencillo?
Respuesta del cliente: “No, no, lo tengo todo colgado».
A lo que respondo: “Muy bien, entonces, vamos a ver tu página”.
Suponiendo que se trata de un panadero que ha montado un servicio de catering para eventos pequeños. Lo habitual para los usuarios on line, es ponerse en el ordenador y buscar el servicio a través de un buscador usando las palabras clave “panadería”, “catering”. Lo más seguro, es que no salga ni en las primeras posiciones de la búsqueda, ni siquiera en las primeras páginas…. Sin embargo cualquier cliente que entre en la tienda a comprar, podrá llevarse consigo un folleto, una revista o un díptico promocional del nuevo servicio…Nuestro cliente (ya sea el de toda la vida o nuevo) podrá ampliar la información que desee en la web, siendo esta un punto de ayuda y no la herramienta principal.
Así, mi conclusión es que el formato físico es necesario para promocionar, informar y ampliar los productos que nos compra un cliente.
Nosotros mismos, los industriales, utilizamos los catálogos que recibimos del sector para resolver las necesidades que se nos presentan. Y luego, si es necesario, consultamos online los precios, la disponibilidad del producto, tiempo de entrega… pero no deseamos empezar una gincana por internet a la búsqueda del mejor postor.
Otro ejemplo donde el papel es el rey, son las salas de espera, donde somos capaces de leer todo lo que tenemos a mano. Aprovecha esta circunstancia para informar a través de catálogos, promocionar con dípticos o emociona a través de pequeñas revistas.
Resumiendo, quien más nos enseña en este mundo son nuestros propios clientes. He aprendido que la mayoría de ellos, aquellos que son referencia en su sector, con unas páginas corporativas de bandera, no han abandonado el papel. Lejos de ello, saben conjugar ambos mundos abarcando el conjunto completo: La información gráfica en soportes físicos (paneles, displays, vinilos, folletos, dípticos…) y la información on line en su página corporativa.
Podemos recibir una invitación para un evento o congreso a través de correo electrónico, pero depende de muchos factores que la notificación sea abierta y leída. Un sobre especial a nuestra atención, recibido por correo o mensajería, con una invitación elegante, es prácticamente imposible lanzarlo a la papelera …ni de rechazar la invitación.
Así pues, el poder del papel es infinito. Por lo que todo lo que hagamos llegar en este formato tendrá una visibilidad e impacto mayor sobre el receptor.